Epicteto

Avaricia

Conserva bien lo tuyo y no codicies lo ajeno. Si tal haces, nada podrá impedirte el ser dichoso.

Belleza

No es negando la belleza como se sustrae el hombre a sus encantos, el mérito está en resistir reconociéndola.

Bondad

Si quieres algo bueno, búscalo en ti mismo.

Crítica

La cosa más difícil es conocernos a nosotros mismos, la cosa más fácil, hablar mal de los demás.

Derecho

Cuando hayas de sentenciar, procura olvidar a los litigantes y acordarte sólo de la causa.

Deseo

No pretendas que las cosas sean como las deseas, deséalas como son.

Esperanza

No debemos sujetar nuestra nave con una ancla sólo ni nuestra vida con una sola esperanza.

Espíritu

El alma es como una ciudad sitiada: detrás de sus muros resistentes vigilan los defensores. Si los cimientos son fuertes, la fortaleza no tendrá que capitular.

Felicidad

La felicidad consiste en ser libre, es decir, en no desear nada.

Gozo

Cuando los placeres se exageran, truécanse en dolor.

Grandeza

Engrandecerás a tu pueblo, no elevando los tejados de sus viviendas, sino las almas de sus habitantes.

Hablar

De no hablar sino cuando fuere preciso, raramente despegaríamos los labios.Vela por tus pensamientos cuando estés solo y por tus palabras cuando estés con los demás.

Ingratitud

Nada posees que no te haya sido dado. El que todo te lo dio bien puede quitarte algo. Eres, pues, no sólo un insensato, sino ingrato e injusto al pretender oponerle resistencia.

Libertad

¿Es la libertad algo más que el derecho a vivir como se desee? Nada más.Nadie es libre si no es dueño de sí mismo.

Mente

Lo más insufrible para el hombre razonable es lo que carece de razón.

Miedo

No hay que tener miedo de la pobreza, ni del destierro, ni de la cárcel, ni de la muerte… De lo que hay que tener miedo es del propio miedo.

Opresión

¿Quieres dejar de pertenecer al número de los esclavos? Rompe tus cadenas y desecha de ti todo temor y todo despecho.

Orgullo

Dos cosas hay que quitarle a los hombres: la vanidad y la desconfianza.

Paz

En la mayoría de los hombres, la calma es letargia, la emoción es furor.

Prudencia

Confiamos porque somos precavidos.

Saber

Tan difícil es para los ricos la sabiduría como para los sabios adquirir riqueza.

Soledad

Cuando estés de noche en tu alcoba, aun cuando tengas las puertas y las ventanas cerradas y apagada la luz, no digas que estás solo: nunca se está solo.

Triunfo

No se llega a campeón sin sudar.

Verdad

La verdad triunfa por sí misma, la mentira necesita siempre complicidad.

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