Significado
Usamos este dicho como muletilla para indicar resignación ante un problema o el fin de una disputa o un disgusto.
Ejemplo
Que no podemos irnos un mes de vacaciones a Italia porque nos sale muy caro, pues nos vamos un par de semanitas a Santander, y aquí paz, y después, gloria.
Origen
La frase era una fórmula con la que los sacerdotes de los siglos XVIII y XIX sustituían al amén o al así sea que normalmente daba fin a sus sermones.