Significado
Alude este refrán a la necesidad de tener bien alimentada a la servidumbre para que ésta pueda servir mejor a sus amos, consejo éste, por cierto, al que, según otro refrán, pocos amos hacen caso, pues Dueños lo dan, y siervos lo lloran.
Términos
Literales: vino puro, ajo crudo hacen andar, mozo agudo.