Significado
Aconseja ser rigurosamente ecuánime en la atención a las partes que comparecen en una disputa. Como Alejandro Magno, que oía siempre a los querellantes con una oreja tapada y decía: «Reservo la otra oreja para el inculpado.».
Términos
Literales: tenga, juez, oreja, demandante, parte.