Significado
Lo dicen a modo de excusa los ahorradores empedernidos, aunque después nunca encuentran el momento de gastar. Como aquel vinicultor manchego que, llamado por casualidad a obsequiar con los vinos de su bodega al mismísimo rey de España, respondió así a los elogios del monarca: «En realidad, señor, otros aún mejores tengo, pero los guardo, a ver, para las ocasiones.».
Términos
Literales: ocasiones son, doblones.