Significado
El refrán procede de la expresión latina Quod natura non dat, Salmantica non prestat, y advierte que por grande que sea la fama de un centro de enseñanza, si el que a él acude carece de dotes para el estudio, no obtendrá provecho alguno. Equivale, pues, a este otro: El que asno fue a Roma, asno se torna.
Términos
Literales: natura no da, salamanca no presta.